En las últimas 48 horas la invasión Israelí en Gaza ha continuado dejando distintas represalias no sólo a la población del propio Estado de Palestina sino también en la comunidad internacional.
El día de ayer, 25 de mayo de 2024, se cumplieron 231 días desde que el conflicto inició y ciertamente parece ser que esto está aún lejos de terminarse. Desde que España, Noruega e Irlanda declaran que el próximo 28 de mayo podrían reconocer a Palestina como un estado legítimo Israel se ha comprometido a hacer que “se arrepientan” es así como la cosa llegó a tal punto que se ha dicho que en Israel se ha llamado a los respectivos embajadores de cada uno de los países para reprenderlos y una legisladora llegó a pedir que se debatiera reconocer el reconocimiento del País Vasco y Cataluña como “represalia”, sin embargo, es de notarse que aún no hay ninguna petición ni reunión agendada en el parlamento para hacer esto. Asimismo, una repercusión que sí sucedió por parte de Israel hacia España fue el anuncio de que el consulado español tendría prohibido atender a ciudadanos en Cisjordania (Palestina).
Por otro lado, el hospital Al-Aqsa se habrá quedado sin electricidad luego de los constantes ataques israelíes, de este hospital son dependientes 30 heridos que recién llegaron al hospital (Dr. al-Degran. K., 2024) así como una cantidad aún indeterminada de bebés prematuros (Al Jazeera).
Bombardeos israelíes en el norte de Gaza matan a 7 personas. Israel bombardea una casa de almacenamiento de ayuda en Deir al-Balah, matando a más de 12. En las últimas 24 horas se han reportado 103 decesos palestinos y 412 heridos. Mientras tanto, el grupo “Hamás” anunció la captura de soldados israelíes tras una batalla en el campamento de Jabalia, ubicada en el norte de la Franja de Gaza, también anunciaron que hubo bajas por parte del bando israelí, además, también se reporta que un brazo armado de Hamás lanzó cohetes contra Israel (Lets talk Palestine, 2024).
En el ámbito internacional, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) ordenó medidas tras el proceso del caso Sudáfrica vs Israel conocido oficialmente como “Aplicación de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio en la Franja de Gaza (Sudáfrica contra Israel)” el cuál inició desde diciembre del año pasado. Sudáfrica alega que Israel ha violado sus obligaciones establecidas en la Convención sobre el Genocidio de 1948 y el derecho internacional por sus acciones sobre la vida del pueblo palestino en la Franja de Gaza. Las audiencias públicas se realizaron el 11 y 12 de enero del presente año y para el 26 de enero Sudáfrica había logrado conseguir la orden por parte de la CIJ de medidas cautelares. Finalmente, el 24 de mayo, la CIJ ordenó a Israel detener inmediatamente su invasión de Rafah y retirarse; durante este proceso se declaró que las medidas cautelares eran inadecuadas para la situación actual, que las medidas israelíes para la evacuación de Rafah son insuficientes y la situación humanitaria es «desastrosa», y que Israel debe permitir investigaciones sobre acusaciones de genocidio. Además, La corte sugirió que la ofensiva podría imponer condiciones destinadas a causar la destrucción física de los palestinos en Gaza, y se exigió la reapertura inmediata del cruce de Rafah para la ayuda humanitaria.
Algunos de los países que apoyaron a sudáfrica en este caso fueron Brasil, Chile, Colombia, Egipto, Eslovenia, Irlanda, Pakistán, Turquía y Venezuela así como la propia Palestina y otras organizaciones como la Liga Árabe, la Organización para la Cooperación Islámica y el Movimiento de Países No Alineados (NOAL). Los que se mantuvieron neutrales fueron Canadá, Dinamarca, España, Costa Rica, Finlandia, Japón, Francia y Noruega. Por último, algunos que apoyaron a Israel en el caso fueron Australia; Alemania; Estados Unidos; Guatemala; Italia y Reino Unido.
Para concluir esto, el grupo de monitoreo de Derechos Humanos “Euromedhr” documentó 42 formas de tortura por parte de las fuerzas israelíes contra palestinos dentro de los que se incluyeron la rotura de huesos y dientes, tortura psicologíca, electrocutaciones y absusos sexuales.
Parece ser que el escenario internacional está lejos de unirse para lograr la paz en esta zona, y al final las víctimas son los miles de civiles que han perdido la vida por los intereses de unos cuantos. El avance de la CIJ en el caso de Sudáfrica e Israel representa una manera significativa en la que se le sigue poniendo presión al gobierno de Benjamín Netanyahu, sin embargo queda claro que lejos está aún de parar mientras la situación humanitaria continúa siendo cada día peor en la Franja de Gaza.
